martes, 14 de agosto de 2012

La Siento Así

Detrás no es tan oscura. Lo que pasa es que la luz la bordea, ni la roza. Por detrás, tiene colores y aromas, y un acento suave y sensual. A veces, mientras nadie la mira, sonrie y prepara su arsenal. Y cuando elige a su presa y pone todo a funcionar, en implacable y mortal. Sus golpes certeros penetran sin dolor, más al intentar desclavar su arma, te desgarra el corazón, te rompe hasta el alma y te hunde en el dolor. Una vez, conseguí safarme. Pero cuando creí que mi vida estaba a salvo, y me solté de nuevo, volvió. Y con un giro bruscó golpeo otra vez, de frente, cara a cara. Yo no la vi, pero por detrás intuí su cálido aliento de amor, su breve paz traicionera y un regusto a placidez, que me engañó durante un tiempo. Hoy la espero en cualquier esquina, pero estoy preparado. No presentaré batalla, la dejaré sentirse victoriosa, y cuando se crea dueña de mis actos y mi voluntad, y yo haya saciado el apetito oscuro que todos poseemos, acabaré con ella... por lo menos lo intentaré, aunque estas cosas inmortales, es lo que tienen, que no mueren nunca. Pero por detrás, si miras bien y rebuscas entre sus cabellos, posee un punto debil. Por detrás, donde se muestra sugestiva, hermosa y entregada, posee un corazón herido, que no acepta caricias. Si penetras hasta el, y lo rozas, la eternidad desaparece, y lo que antes era prohibido, ahora se muestra tolerable y hasta consentido.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Tortuosa pero emocionante, íntima, me gusta amigo. Angel