domingo, 29 de junio de 2008

El Veraneo


Casi todas las cosas en la vida, siguen el curso de la edad con las que las vemos.
Vivir en pareja, tener hijos, un trabajo estable, escuchar el telediario, etc. Incluso el artefacto con el que hacemos surf, cambia. Todo evoluciona y se transforma acomodandose a nuestro estilo y ritmo de vida.
En mi caso, hubo siempre algo que lo era todo. Todas las esperanzas se depositaban en esta época de calor y playa. Hoy el verano, ya tiene fin. Pasa rápido. Sin grandes artificios y rebuscadas tretas para respirar más hondo cada segundo, y tratar de alargarlo hasta el infinito.
Observo La Playa desde casa y siempre hay demasiada gente, "too much" Nordés, el calor es demasiado, estoy cansado del curro, o: -No hay olas no?
Aunque el factor más determinante sea el de siempre. Que ya no estáis ahí.
Recuerdo cuando abríamos y cerrábamos la puerta de La Playa. Cuando desde las diez de la mañana hasta las diez y media de la noche, eramos parte viva de ella. Incluso me acuerdo de alguna jornada maratoniana de dos días seguidos sin salir de la arena, con sus noches incluidas. Con Hector y Alberto(Tete). No salimos ni a comer, nos avituallaban los amigos... je je je. Ahí estábamos, "batiendo records de permanencia".
Ya no somos como Leroy "el masoquista". Ya no estamos siempre allí. Ya no hacemos de todo. Ahora sí batimos records. Pero de estupidez.
Todos curramos, y tenemos familias y terrenos que cortar y en los que estamos tranquilos sin aguantar a los de la toalla de al lado. En los que no nos relacionamos con nadie y hacemos lo que queremos. Pero no son La Playa. Y no estamos todos. No hay orilleras para coger a pelo y atropellar alguna señora "despistada". Desde aquí les pido disculpas a todas ellas.... Esas mismas orilleras que repartían golpes y sustos a visitantes esporádicos de la playa y "madrileños" incautos.
Y nos hacían reír viendo el espectáculo. No hay partidas de palas interminables. Lanzando cañonazos y cogiendo alguna imposible. No hay corros e inagotables charlas sobre olas y fiestas.
En definitiva, ya es casi julio, y sólo he ido un día a la playa. Triste.
Eso sí, hubo "naked surf" y estábamos unos cuantos de los de siempre.
A ver si cesa el puto Nordés de una vez y empiezo a bajar. Con mis ensaladas, tablón, palas, toalla, neverita, libro, etc. Sí, soy un "chomin" de playa. Lo somos todos y nos gusta. No entiendo a los "surfers" de aparcamiento.
La Playa nos hizo tal y como somos, nos sirvió de guarida y de pista de recreo. Nos educó y nos convirtió en amigos. Es nuestra casa y a donde muchos regresaremos para siempre algún lejano día.
Ahora que casi todos tenemos niños, ¿no merecen ellos la misma suerte que tuvimos nosotros?
Joer, por mis palabras, parece que no vamos nunca a la playa y no es así. Lo que pasa es que ese año vuestro verano se retrasa. A ver si os venís para aquí de una vez, leches!!
Venga, nos vemos abajo, donde siempre. Cerca de la orilla.